No sé bien qué decir… podría no decir nada, pero tampoco quiero dejar pasar este momento… Estoy muy triste con la muerte de Néstor Kirchner. Los que pueden no involucrarse, sinceramente no sé cómo hacen. Y los que festejan esto, que sepan que “muerto el perro, no se acabó la rabia”. Que estamos acá los que nos sentimos identificados con un modelo de país y no lo vamos a dejar ir tan fácilmente. Los que vimos con alegría cómo se iba transformando la Argentina desde 2003 en adelante, cuando Néstor la agarró hecha trizas, cuando ya era costumbre observar la debacle institucional por televisión… Y no lo digo porque “yo estoy mejor”, o porque mi familia lo esté, lo digo por una cuestión ideológica, por las políticas inclusivas y las decisiones tomadas, me “toquen” o no me toquen. Gracias Néstor por ser el primer líder político con el que me identifico y por el que me dan ganas de discutir acaloradamente. Gracias, a vos y a Cristina, es decir, al KIRCHNERISMO, por no caer en la canallada de ...
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